Hoy os quiero enseñar una muñeca especial. No sabría como clasificarla. Según pude consultar con una experta en esta marca de muñecas, podría tratarse de una Laura que no pasó el control de calidad o que quedó fuera de la cadena de montaje antes de que se le implantara el pelo y se le pintara la cara.
Cuando la compré creí que le habían arrancado el pelo y despintado los labios y los ojos pero, al fijarme mejor, fue cuando comprobé que nunca había estado pintada y ni siquiera tenía los agujeritos para el pelo.
La Laura maniquí es una muñeca que me encanta. La he visto varias veces en ferias pero, por su elevado precio, nunca me ha venido bién de comprarla. Quizás algún día la consiga y, de momento, me conformaré con esta rareza.
puedes ponerle una peluca y pintarle la cara tu misma. Asi tendrás la muñeca personalizada. hay tutoriales en internet de como pintar las muñecas.
ResponderEliminarGracias Vicky. En un principio pensé en hacerlo pero luego me pareció más interesante guardarla como una rareza y esperar a encontrar una Laura completa. No me veo capaz de pintarle la cara tal como es en realidad.
ResponderEliminarNo la pintes, perdería muchísimo de su valor, no por pintarla en sí, sino porque el hecho de que sea una muñeca incompleta de fábrica la convierte en un objeto de coleccionista muy valioso y de gran rareza, es como los sellos o las monedas con alguna tara, en su aparente defecto y la escasez de piezas que lo comparten radica su valor.
ResponderEliminar¿Verdad que sí? Yo pienso igual y la guardo como un tesoro.
ResponderEliminarAunque no la vendas quedate con el recuerdo es única!
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